Expertos de diferentes ámbitos analizaron las dificultades que enfrentan las ciencias forestales, silvicultores y profesionales para el mantenimiento, manejo, recuperación y restauración del bosque nativo esclerófilo en un escenario de cambio climático y megasequía que afecta a los bosques mediterráneos de la zona norte y central de Chile.

Con la asistencia de consultores ambientales y forestales, propietarios de terrenos con formaciones vegetacionales esclerófilas, profesionales de la Corporación Nacional Forestal (CONAF) e investigadores de la Facultad de Ciencias Forestales y de la Conservación de la Naturaleza de la Universidad de Chile, se realizó una jornada de taller en terreno en la localidad de María Pinto, Región Metropolitana, lugar donde se establecieron los ensayos en el marco de los proyectos financiados por el Fondo de Investigación del Bosque Nativo, que administra CONAF.

En la jornada, que contó con la participación de 23 personas, se presentaron los proyectos “Caracterización de bosques esclerófilos degradados y actividades silvícolas para su recuperación” y “Manejo orientado a favorecer el establecimiento y desarrollo de la regeneración en formaciones esclerófilas”, a cargo de los investigadores Sergio Donoso, ingeniero forestal y Doctor Ingeniero de Montes de la Universidad de Córdoba, España, y la ingeniera forestal Claudia Espinoza, ambos pertenecen al grupo de investigación de Bosques Mediterráneos de la Facultad de Ciencias Forestales y de Conservación de la Naturaleza de la Universidad de Chile.

Quien también asistió fue el director de CONAF Región Metropolitana, Rodrigo Illescas, en cuya oportunidad, y al término del taller en terreno, destacó su realización “porque permite compartir las experiencias y resultados que arrojan los estudios que promueve el Fondo de Investigación de la Ley de Bosque Nativo, especialmente cuando los ecosistemas boscosos están enfrentando las consecuencias del cambio climático”.

En esta misma línea, Carmen Gloria Quezada, jefa de la Sección de Fomento a la Investigación del Departamento de Bosque Nativo de la Gerencia de Bosques y Cambio Climático de CONAF, subrayó la relevancia de ambos proyectos como contribución al conocimiento en la restauración de formaciones vegetales esclerófilas y su aplicación en la Ley 20.283 sobre Recuperación del Bosque Nativo y Fomento Forestal.

Entre las experiencias presentadas de estas investigaciones, se concluyó que la especie huingán es la que dio mejores resultados en las plantaciones destinadas al enriquecimiento en el subtipo espinal del bosque esclerófilo, bajo las actuales condiciones climáticas. En tanto, el quillay, boldo y espino no alcanzaron condiciones positivas; siendo además imprescindible dar un riego inicial a las especies plantadas con cinco litros, por una vez, como dosis óptima, según lo establecido en estos proyectos.

Otro de los aspectos relevados fue la necesidad de contar con plantas producidas en vivero con alta tecnología, dado que el uso de plantas generadas en la forma tradicional no asegura éxito en la plantación y que es indispensable hacer exclusión y protección individuales a plantas contra los roedores y lagomorfos, ya que producto de la escasez hídrica las poblaciones de fauna menor están en desequilibrio, depredando la vegetación a su alcance y con ello afectando al bosque y las formaciones vegetacionales en todos sus pisos.

Asimismo, se consignó que los factores de degradación están siempre presente, tales como ganadería, herbivoría, leña, carboneo, presión por conversión a uso agrícola e incendios forestales.

Por otra parte, se abrió espacio a la discusión sobre migración de plantas desde zonas más áridas hacia la zona central, al registrarse buenos resultados de prendimiento y adaptación en los proyectos, como el chañar. Por ello, se consideró que debe seguir estudiándose sus ventajas y desventajas.

La producción de semillas también está afectada por el cambio climático, manifestándose ello en que la colecta es incierta y de gran dificultad. Durante los últimos años se registró una incipiente floración, como consecuencia de que los árboles no alcanzaron a formar y producir semillas debido a la sequía y golpes de calor. Por lo tanto, la actividad en planes de restauración debe ser muy bien planificada.

Finalmente, se concluyó que todos los esfuerzos a desplegar para lograr la restauración inciden directamente en los costos de las actividades para el establecimiento y desarrollo de la regeneración en formaciones esclerófilas, que comprenden producción o adquisición de plantas, preparación de suelos, protección individual de plantas, cercado y riego, las que en conjunto superan con creces a las actividades fijadas en la tabla de valores de la Ley de Bosque Nativo para el tipo forestal.

20 junio, 2022