En un momento fue considerada extinta. Sin embargo, estudios realizados pudieron detectar poblaciones de chinchilla de cola corta o andina (Chinchilla chinchilla) en algunos roqueríos de las regiones de Antofagasta y Atacama y también en Argentina, pero extinta en Perú y sin confirmación de detección en Bolivia, aunque con posibilidades de algunos grupos de esta especie.

Ahora la noticia es mejor, porque gracias a las cámaras trampa la Corporación Nacional Forestal (CONAF) localizó una población de ellas en la Reserva Nacional Los Flamencos, sector Salar de Tara y Aguas Calientes, Región de Antofagasta, donde no habían registros de este roedor cazado por su piel.

El hallazgo fue realizado por Héctor Gallardo, biólogo encargado del programa de monitoreo de cámaras trampa en ese salar, junto al administrador de la Reserva Nacional Los Flamencos, Roberto Cruz, y los guardaparques Alejandro Cruz, César Romero y René Novoa.

Cabe destacar que esta especie está considerada por la IUCN en peligro y catalogada como en peligro crítico en Chile por el Reglamento de Clasificación de Especies (RCE), por lo cual el descubrimiento es muy relevante, ya que permitirá a CONAF desarrollar programas especiales de conservación para la especie, integrándose a los objetos de conservación de esta unidad del Sistema Nacional de Áreas Silvestres Protegidas del Estado (SNASPE).

Este nuevo avistamiento aporta información actualizada y valiosa sobre la chinchilla, al aumentar su distribución geográfica actual y, además, representa su ubicación más al norte conocida hasta ahora en Chile, tras haber sido cazadas de manera desmesurada por la industria peletera.

El proceso de monitoreo en esta reserva por cámaras trampas, se viene realizando desde el año 2018, junto a la comunidad atacameña, al cerrarse estos sectores de la Reserva Nacional Los Flamencos, justamente para permitir la labor de conservación de los flamencos que anidan en la zona. Por lo mismo, una de las teorías es que la clausura del sector al uso público puede haber beneficiado a esta especie, entre otras de la zona altoandina.

Para los profesionales del Departamento de Áreas Silvestres Protegidas de CONAF Región de Antofagasta, el hallazgo subraya la importancia de estas unidades del SNASPE que trabajan para la conservación y protección de los ecosistemas nativos, de manera que son capaces de dar refugio a especies tan frágiles e importantes como la casi desaparecida chinchilla de cola corta o andina.

11 diciembre, 2020